Junto a un grupo de legionarios, que cumplieron 25 ó 50 años de sacerdocio, visitó donde nace el cristianismo, con el fin de renovar su vocación. ”Estos lugares siempre, como el Evangelio, te dicen algo nuevo, pues con razón se ha dicho, y el Papa hace muy poco lo ha recordado, que Tierra Santa es el quinto evangelio”, señala.
¿Qué significa para su vocación sacerdotal visitar Tierra Santa?
Para todo cristiano, y cuanto más para mí como sacerdote, es un regalo enorme y una gracia muy especial poder visitar los lugares en los que Cristo salió al encuentro de la humanidad haciéndose uno de nosotros y viviendo como el prototipo de todo sacerdote. Es siempre una experiencia que transforma, y aunque, como en mi caso, no sea la primera vez que voy, estos lugares siempre, como el Evangelio, te dicen algo nuevo, pues con razón se ha dicho, y el Papa hace muy poco lo ha recordado, que Tierra Santa es el “quinto evangelio”. Allí seguro que te vas a encontrar con Jesús que te sale al encuentro en cada lugar.
¿En qué consistió el viaje?
Es una experiencia nueva que se implementó para los sacerdotes legionarios, a partir de este año, con el objetivo de que sea más una renovación sacerdotal que una peregrinación. Está dedicado a los sacerdotes que cumplen 25 y 50 años de sacerdocio. Las peregrinaciones suelen durar menos de 15 días que fue el tiempo que tuvimos. La primera parada fue en Galilea donde nos acogió el Magdala Center (centro de peregrinación del Regnum Christi). Desde allí nos desplazamos a los lugares cercanos donde se desarrollaron los grandes eventos del Evangelio como: Nazaret, Caná, Gerasa, el lugar de la multiplicación de los panes y los peces, el monte de las Bienaventuranzas y también a algunos parques naturales de esa región tan verde y fértil que contrasta con la zona de las cercanías de Jerusalén.
¿Llegó con algún nuevo propósito o visión, luego de este viaje para su vocación sacerdotal?
Lo que pretende la renovación es un volver a experimentar aquellas motivaciones del inicio de la vocación y sacarles nuevos brillos. Esas motivaciones son las que te han sostenido y que tienen que seguir sosteniéndote e impulsándote durante toda la vida. En mi caso una de esas motivaciones fuertes es el momento de mi encuentro personal, y sin duda irrepetible, en que sentí la invitación de Cristo a seguirlo como su apóstol en la legión. Hacer esa experiencia de renovación, en el marco de los lugares santos, es algo muy especial que, aunque no es imprescindible, ayuda a darle un nuevo impulso a la vida de apóstol.
¿Alguna novedad para este 2023 para las secciones que dirige en Rancagua y su labor de capellán del colegio La Cruz?
Mi tarea más importante es ayudar a que cada persona, sea de la gran familia que es el colegio o de las secciones, haga su experiencia personal de Cristo que le sale al encuentro, y aunque eso en sí no es una novedad, sí lo es el ánimo y la ilusión.
¿Qué significa para su vida el Regnum Christi?
Es el lugar donde el Señor me ha pensado y puesto para que descubriera y desarrollara mi vocación sacerdotal y la viva de un modo especial, el modo Regnum Christi, dentro del cual las diferentes vocaciones que lo integran tienen un papel único e insustituible.