Se trató de una vigilia nocturna, realizada durante la noche del 25 y la madrugada del 26 de noviembre, frente a Jesús sacramentado, en el Santuario Inmaculada Concepción del cerro San Cristóbal.
La actividad fue organizada por laicos de diferentes carismas y surgió con la intención de manifestar en comunidad la fe en Cristo. “Después de lo dañada que está la Iglesia Chilena, ver a tantas personas, de distintos carismas y todos arrodillados frente a un mismo santísimo fue muy gratificante y sorprendente”, comenta Jose Cruz, quien participó de esta instancia.
“Había personas de todas las edades, estilos y lugares. Abuelos con sus nietos, familias completas, grupos de amigos, sacerdotes, monjas, etc. Para mí esta experiencia fue reconfirmar que, desde la realidad de cada uno, Dios sale a nuestro encuentro de manera muy personal y especial”, añade Jose.
Junto a la Jose subieron algunas consagradas y un grupo de jóvenes, entre ellos Ignacia Camos. “Fue una experiencia única, que pocas veces se repiten, donde uno podía sentir el furor de las personas de estar haciendo una adoración en la noche. Fue emocionante darme cuenta de que Cristo Rey es una celebración no sólo del Regnum Christi, sino que de la Iglesia en Chile y en el mundo, que trasciende a mi sección y localidad. Da lo mismo el cómo uno lo viva, pues todos estamos en la misma parada: pasar una noche con Él”.