Cerca de 80 jóvenes participaron en esta instancia de oración y reflexión que comenzó el Jueves Santo con una adoración eucarística. “El retiro me ayudó a ponerme en sintonía con lo que se revivió en esos días: la muerte, espera y resurrección de Cristo, el regalo y acto de amor más grande que puede existir”, afirma Bernardita Arze.
El retiro tuvo como temática: “Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos” (JN 15, 13). El viernes por la mañana el Padre Juan Pablo Álamos LC abordó “El juicio de Jesús y luego el Padre Javier Ayala LC se centró en “las siete palabras desde la cruz”. El sábado, nuevamente hubo dos meditaciones: “María y nosotros representados en Juan”, y “El gran silencio”.
“El hilo conductor del retiro fue acompañar a Cristo como san Juan Evangelista, el apóstol joven, que llegó solo a los pies de la cruz”, explica M. José Coudeu, joven de la sección que fue parte del equipo organizador que integró también el Padre Juan Pablo Álamos LC, Laura Garza, Catalina Campos y Martín Valderrama.
Bernardita Arze, universitaria de cuarto año y exalumna del San Francisco de Asís, participó por primera vez en el retiro de Semana Santa para universitarios en 2022, al que llegó por un aviso que vio en Instagram. Desde entonces participa en un equipo y en las actividades que organiza la sección de jóvenes de La Dehesa.
¿Por qué decidiste realizar un retiro?
El retiro me ayuda a ponerme en sintonía con lo que se está reviviendo estos días: la muerte, espera y resurrección de Cristo, el regalo y acto de amor más grande que puede existir. Me gusta conocer más de este misterio a través de las charlas y también poder entregar tiempo y dedicación a mi relación con Cristo estos días.
¿Qué te ha parecido la experiencia?
Muy buena. Me gustaron mucho las charlas de los padres, eran muy humanas, y que fuera en la mañana porque después podía ir a vivir lo aprendido a mi vida del día a día, en mi casa con mi familia.
¿Con qué reflexión te quedas?
Lo que más me marcó es que toda Cruz unida a Cristo termina en Gloria. Nunca le había podido poner palabras a eso, que la vida del cristiano no es puro sufrimiento. Comprendí que Dios se hizo hombre porque quiere tener una relación con nosotros, acompañarnos y ayudarnos con ese peso y llevarnos a la felicidad plena. Además, que nos ama infinitamente más de lo que podemos entender, tal como somos.
¿Qué significa para ti Reino?
Es un espacio en el que me siento libre de amar a Dios con todas las ganas y sin sentirme incómoda. Es creerse el cuento y vivir el Cielo acá en la Tierra.
