Cerca de 300 personas de 55 movimientos participaron en el VII Encuentro de Movimientos y Asociaciones Laicales en el Santuario de Schoenstatt ubicado en La Florida. Fue una instancia de unión que favoreció la búsqueda de caminos y acciones concretas para comprometer a los laicos como Pueblo de Dios frente a los desafíos actuales y de construcción de una nueva Iglesia.
Esta instancia de reunión para los laicos asociados, cuyo lema fue “El hace nuevas todas las cosas”, contó con una reflexión del administrador apostólico de Santiago, Monseñor Celestino Aós, que invitó a los asistentes a mirar el futuro con esperanza y a estar dispuestos a hacer los que Dios nos pide y ofrecer lo que cada uno tiene en pos de la renovación de la Iglesia de Chile. La exposición principal estuvo a cargo del teólogo español Antonio Bentué que llamó a retomar el Evangelio, a cambiar la mentalidad, a evitar el poder y reforzar el servicio y a concretar una conversión pastoral que nos lleve a ser nuevos cristos y llevar adelante la nueva evangelización.
En su charla el teólogo español afirmó que Iglesia es un sacramento, signo que nos conecta con lo invisible, solo si refleja la visibilidad del Evangelio y que el criterio de Cristo es más importante que las tradiciones eclesiásticas. Bentué enfatizó que la Iglesia es servicio, no poder, y que ante todo primero es Pueblo de Dios. Finalmente el profesor de la Pontificia Universidad Católica instó los laicos asistentes a la santidad, a ser misericordiosos y a ser testimonio para que el espíritu de Dios, su Evangelio lleguen a todo el mundo. En la parte final de la actividad hubo talleres con mesas de diálogo y espacios de conversación donde se compartieron qué inspiraciones quedaron para ser parte de la construcción de la nueva Iglesia.