Cada dos semanas cerca de 150 universitarios se reúnen en la Parroquia Sagrada Familia, de las Pataguas, para participar en este programa que dicta el Padre Javier Ayala L.C. “El anuncio cristiano es algo siempre nuevo, capaz de tocar una y otra vez el corazón”, reflexiona el Padre Javier sobre la alta convocatoria. Se trata de la tercera versión, ya que surgió en 2019 junto a un grupo de jóvenes miembros del Regnum Christi. “En eso está su fuerza”, comenta el Padre Javier.
Presentar un cristianismo accesible y atractivo para un joven de hoy es el principal objetivo del curso. Su contenido está basado principalmente en la obra maestra “Introducción al cristianismo” del Papa Emérito Benedicto XVI, y del que proviene el nombre del programa. En 2020 se centró en la razonabilidad de la fe y fue trasmitido por Instagram a causa de la pandemia. Las charlas están grabadas y disponibles en el canal de YouTube (@Introducción al Cristianismo). Este año se retomó el formato presencial, por lo que se ha dictado en la Parroquia Sagrada Familia, de Las Pataguas.
¿A quién está dirigido?
Principalmente a jóvenes entre 18 y 30 años. No es un curso solo para católicos practicantes, no hay ningún requisito especial para participar. Es abierto para todos: “para los que creen y para los que quieren creer”. Lo que queremos mostrar es que es posible pasar de un cristianismo “cultural” que no afecta en nada a la vida, a un “cristianismo real” que lo transforma todo. Con Jesucristo la vida se hace más plena y, en definitiva, más feliz.
¿Qué viene para 2022?
Queremos empezar un camino de dos años (cuatro semestres). Después de una primera parte más existencial, estamos preparando otras tres “temporadas”, de un semestre cada una, que abordan los tres grandes pilares de la fe (El Credo, los Sacramentos y los Mandamientos). Nuestro sueño es generar una comunidad con este recorrido y poder ir juntos a la JMJ de 2023 en Lisboa.
¿Cuáles son los temas que más atraen a los jóvenes?
Todo lo que habla directamente a su vida es muy atractivo. Los jóvenes se aburren y se alejan cuando no encuentran el sentido de las cosas, en especial cuando no encuentran sentido a la fe. Si el cristianismo es algo cultural, que no aporta nada a mi vida, es obvio que no me interesa. Pero cuando captan que el cristianismo es un cambio profundo de vida, que ser cristiano es como pasar de una vida en blanco y negro al color HD, se comprometen a tomarse en serio su fe.
¿Cómo evalúa esta experiencia?
Ha sido una experiencia muy positiva. Después de tanto encierro, sin poder tener actividades presenciales, ha sido una sorpresa encontrarse con tanta participación. No sabíamos cuánta gente iba a llegar y nos sorprendió mucho la asistencia. ¡Hasta tuvimos que pedir que no invitaran a más gente por tema de aforos! Eso nos habla de la gran sed de Dios y de vida espiritual. Los tiempos difíciles que estamos viviendo han despertado el corazón de los jóvenes.