Con seis años de sacerdocio, el padre Javier Ayala enfrenta con alegría y visión una etapa clave para el Regnum Christi en el territorio. Inicia un nuevo rol dentro del Regnum Christi, movimiento al que define como “una familia espiritual dentro de la Iglesia”. Asume la misión de Delegado General Territorial de Apostolado, una responsabilidad que lo conecta directamente con el corazón de la labor apostólica del movimiento.
“Apoyar al gobierno del territorio (al
Colegio Directivo Territorial) en el impulso y alineación apostólica”, explica al referirse a su nuevo rol. Esta misión la recibió “con paz y alegría”, y la valora como una oportunidad de gran contacto con “todos los apóstoles RC”.
Consultado por las fortalezas del Regnum Christi en este momento, Javier es claro: “La fortaleza que veo en el Regnum Christi son las personas ycómo en las localidades se va viviendo cada vez más la misión en comunión, caminando todos juntos”.
En esta etapa, lo acompaña el Padre Luis Rodrigo Núñez como subdelegado, quien estará particularmente enfocado en la realidad de Argentina. “A él le corresponde un acompañamiento más cercano a esas localidades y a mí más la visión de todo el territorio”, precisa Ayala.
Uno de los principales desafíos será lograr una mayor sintonía entre localidades. “Ir ayudando a todas las localidades a seguir enfocándose y alineándose con la visión territorial”, es una de sus prioridades, y para ello considera clave “crear o fortalecer los equipos, según cada realidad”.
Sobre el rol de los jóvenes, señala que “los jóvenes siempre han sido líderes en el impulso apostólico del RC y lo seguirán siendo”, mientras que, en relación con los colegios, afirma que “existen con el fin de evangelizar las familias y alumnos a la vez que cumplen con su misión académica integral.
La entrevista concluye con un llamado a la comunión en la misión: una invitación a todos los miembros y colaboradores del Regnum Christi a seguir caminando juntos, como una verdadera familia espiritual.
