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Catorce miembros del Regnum Christi participaron en esta actividad en la que fueron acompañados por el Padre James Cleary L.C y el P. Javier Caballero L.C. “Es una maravilla vivir esto con un grupo de Amigos en Cristo y compartir con ellos las alegrías y dolores de la vida”, destaca Enrique Cruz, miembro del RC.
Enrique se integró a su equipo hace más de tres años, pues considera que es fundamental vivir la Fe en comunidad. “Entre todos nos apoyamos y nos animamos reconociendo que nada nos puede hacer más felices que vivir la vida muy cerca de Jesús y María. La participación de cada uno en los Encuentros es una motivación para no faltar”, comenta.
Para él, instancias de formación y convivencia como el triduo “son un regalo” que le permite desconectarse para conectar con Dios y crecer en la Fe. “Es una maravilla vivir esto con un grupo de Amigos en Cristo y compartir con ellos las alegrías y dolores de la vida. Volvemos renovados con muchas ganas de vivir una vida más plena centrada en el amor y en el servicio a los demás”. Desde su propia experiencia, Enrique está muy agradecido por la entrega generosa y caritativa de los sacerdotes y consagradas “que reflejan el mejor RC de todos los tiempos”, concluye.
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Catorce miembros del Regnum Christi participaron en esta actividad en la que fueron acompañados por el Padre James Cleary L.C y el P. Javier Caballero L.C. “Es una maravilla vivir esto con un grupo de Amigos en Cristo y compartir con ellos las alegrías y dolores de la vida”, destaca Enrique Cruz, miembro del RC.
Enrique se integró a su equipo hace más de tres años, pues considera que es fundamental vivir la Fe en comunidad. “Entre todos nos apoyamos y nos animamos reconociendo que nada nos puede hacer más felices que vivir la vida muy cerca de Jesús y María. La participación de cada uno en los Encuentros es una motivación para no faltar”, comenta.
Para él, instancias de formación y convivencia como el triduo “son un regalo” que le permite desconectarse para conectar con Dios y crecer en la Fe. “Es una maravilla vivir esto con un grupo de Amigos en Cristo y compartir con ellos las alegrías y dolores de la vida. Volvemos renovados con muchas ganas de vivir una vida más plena centrada en el amor y en el servicio a los demás”. Desde su propia experiencia, Enrique está muy agradecido por la entrega generosa y caritativa de los sacerdotes y consagradas “que reflejan el mejor RC de todos los tiempos”, concluye.