Javier, chileno y laico consagrado del Regnum Christi, se trasladó a Roma para trabajar en la Dirección General del Regnum Christi y realizar estudios de postgrado. “Es una alegría enorme volver a Roma por todo lo que representa”. Además, integra la Comisión que está a cargo del camino de preparación a la Convención General de 2024.
Llega a esta instancia con la experiencia de haber participado en la organización de la anterior Convención General que se desarrolló en 2016, y en las asambleas que se realizaron entre 2018 y 2020.
¿Qué importancia tiene para un miembro del Regnum Christi la Convención de 2024?
La convención en sí es un medio… lo importante es que en ésta se cristalice el discernimiento apostólico de la realidad que hacemos los miembros del RC. En este sentido, creo que se pone en relieve el intento de respuesta frente a las inspiraciones del Espíritu Santo y en ello, obviamente, se juega el futuro del Regnum Christi.
¿Qué significa para ti, como laico consagrado, formar parte de esta instancia?
Es un don y una responsabilidad. Don porque es inmerecido y responsabilidad porque hay mucho trabajo que hacer, y lo debemos hacer bien.
¿En qué consiste tu labor como miembro de la Comisión?
La comisión es un órgano colegial que tiene por misión la preparación de la Convención 2024 y todo el proceso para llegar a ella. Entre las labores principales, implica diseñar los procesos, preparar los documentos y el material que se vaya a usar, acompañar a los encargados de los territorios, entre otros.
¿Qué rol tienen dentro de este proceso, la extensión de nuestro carisma, como es la realidad de los colegios, la Universidad Finis Terrae y apostolados como Familia Unida, Anspac, entre otros? ¿están invitados a participar o debieran estarlo?
Por supuesto, ¡todos los programas y obras de apostolado que tenemos encuentran su razón de ser en el carisma del Regnum Christi! Ojalá se puedan sumar al proceso, especialmente ahora en la primera etapa sobre discernimiento apostólico de la realidad.
El camino hacia la convención es una oportunidad para ahondar en cómo estamos respondiendo a las necesidades apostólicas de nuestra Iglesia y sociedad, desde nuestro carisma. ¿Nos quieres compartir alguna reflexión tuya al respecto?
Sí, creo que muchas de las pautas que da el Papa Francisco en Evangelii Gaudium son atingentes a la realidad que tenemos como Regnum Christi. Pienso, por ejemplo, en ser una Iglesia en salida, una pastoral en conversión y, a la vez, misionera en medio de un mundo secularizado, entre otros.