Conoció a los Legionarios de Cristo el año 80 cuando el Padre Raymund Cosgrave L.C dio una charla en su colegio, La Salle. Desde entonces han transcurrido cuatro décadas: “hay conciencia de que el tiempo pasa, que hay más cansancio, aunque también más experiencia. Tengo la ilusión de estar abierto a las sorpresas del Señor y poder seguir haciendo algo por las almas”, reflexiona.
Regresó a Chile hace nueve años, y actualmente es Subdirector de Formación y Apostolado en el colegio San Isidro. Ejercer su sacerdocio en su propio país ha sido “volver a las raíces y reencontrar la propia llamada, pues aquí son lugares, personas y hechos muy significativos”, explica.
A su vez, le ha permitido ver con más frecuencia a su familia y, vivir junto a ella, el proceso de enfermedad y muerte de su padre y estar presente en la vejez de su madre que “dentro del dolor tiene su belleza humana”, afirma.
¿Qué significa para usted cumplir 25 años de sacerdocio?
Experimentar la gracia y fidelidad del amor (a pesar de mi debilidad) que me llamó a un seguimiento más íntimo, y que he podido traspasar a través de mi sacerdocio a otras almas.
¿Cómo ha sido este camino de vida?
Ha sido como una historia de amor.
¿Qué es lo que más le apasiona de esta vocación?
Impartir los sacramentos, sobre todo el de la penitencia, pues el diálogo personal y la dirección espiritual permiten tocar el alma singular y apreciar su infinita belleza.
¿Alguna parábola, o cita del Evangelio que más le gusta?
Zaqueo: Cristo siempre nos mira hacia arriba; las Bodas de Caná: María como intercesora de todas las gracias.
¿Qué viene para los próximos 25 años?
Más achaques (jajaja). Hay conciencia de que el tiempo pasa, que hay más cansancio, aunque también más experiencia. Tengo la ilusión de estar abierto a las sorpresas del Señor y poder seguir haciendo algo por las almas.
¿Qué rol ha tenido el Rengum Christi dentro de su vida sacerdotal?
Ha tenido un rol fundamental. Primero me incorporé al Regnum Christi y después despertó mi vocación Legionaria (aunque primeramente conocí a un Legionario). De niño tuve un sueño muy recurrente que de alguna manera vi reflejado al conocer el RC.
¿Algún mensaje que quisiera entregar a los miembros del Regnum Christi?
Seguir apreciando mucho esta hermosa espiritualidad y vocación que el Señor ha regalado a su Iglesia. Ver toda nuestra historia, como RC, desde la perspectiva de Historia de Redención.
¿Qué consejo le daría a los jóvenes chilenos que buscan vivir su fe?
La fe católica, por ser la fe en una persona, más que normas, preceptos y dogmas, que son importantes, tiene mucho que ver con la felicidad y el sentido de vida.
